Motagua regresa a casa semifinalista
El reloj marcaba los segundos que tenía la mitad de la población catracha con los nervios de punta empezábamos a sentir esos latidos de esperanza, esos que no nos decía ¡Volvamos a volar juntos!
Llego la hora y el Dt Hernán Medina nos decía el siguiente poema azul: Les mando el salvador del arco, Jonathan Rougier, las murallas que te van a defender, el corazón valiente Denil Maldonado, el capitán de las batallas, Marcelo Pereira, sus acompañantes y buscando la ofensiva Wesly Decas y el todoterreno Marcelo Santos, los gladiadores Héctor Castellanos, Juan Ángel Delgado, el escurridizo Diego Rodríguez y la magia de Walter Martínez, y la punta de flecha Iván el bárbaro López acompañado del cañón poderoso de Eddy Hernández.
Eran las 20:00 horas, el árbitro central hacía sonar su silbato y las águilas azules de Motagua agitaban sus alas para empezar el sueño de este vuelo a semifinal. El ciclón fue una tromba desde el inicio del partido buscando ese gol que lo pusiera a soñar a toda la afición azul que estaba pendiente de todo lo que pasara esta noche mágica. 22 minutos habían pasado y Motagua buscaba abrir el marcador, pero el central decidía pintar de amarillos a Denil, 25 minutos y los canaleros sacaban de la línea la opción más clara de gol de los azules, los minutos pasaban y a pesar de que el ciclón buscaba y buscaba abrir ese candado de Tauro la combinación parecía una clave que no se podía descifrar finalizaron los primeros 45 minutos sin goles.
Empezamos la segunda mitad del partido y con michas ansias ya buscando el gol que llevará de paz al equipo, los cambios siguieron con la misma batalla, pero un equipo Panameño que sé cerro y no pudo Motagua abrir ese candado al finalizar los 90 minutos igualdad a 0 goles mando al equipo azul a tanda de los penales.
La concentración y la ilusión acompañaron a los muchachos que lanzaron los penales, Moreira arranca el camino, Ángel Tejeda asegura su penal, Wesly Decas fria mente anota, Marcelo Santos al centro y con fuerza, Jesse Moncada hace su aporte y el gran arquero Jonathan Rougier le grita a los aficionados que viajaron por tres días hasta el estadio universitario de Panamá, nos regresamos a casa siendo semifinalistas.