Juntos somos más fuertes
Las águilas azules del Motagua se enfrentaron a su, similar de los esmeraldas del Marathón por la llave de ida de las semifinales del torneo local.
Una llave muy disputa en los llamados clásicos de las M. Donde los azules dieron su primer grito de autoridad, Agustín Auzmendi de lanzamiento penal, derrota al portero Samudio. Y pone a ganar al mimado pasando 17 minutos de juego.
Un equipo que busca sin parar las oportunidades de ampliar el marcador con aproximaciones peligrosa, exigiendo al portero rival, al finalizar el primer tiempo Motagua se va las regaderas con un marcador favorable a sus aspiraciones de avanzar a la fiesta grande del fútbol nacional.
El segundo tiempo vimos al equipo visitante también hacer lo propio hasta que alcanzo la paridad, pero jamás pensaron que el pistolero Agustín sacaría sus municiones y con un cabezazo vuelve a colocar el resultado a favor del mimado de la afición.
Con doble del que hoy llamado máximo goleador de la Liga Nacional, máximo goleador de la Liga de Concacaf. Nos llena de emoción al saber que estamos a solo 90 minutos de llegar a una gran final, nos emociona verlo correr para celebrar junto a los aficionados, nos emociona saber que nos inyecta ese gramo de fe, que provoca la locura de un estadio que alentó hasta el final.